EMRE

“La vida no es esperar a que pase la tormenta, es aprender a bailar bajo la lluvia.”

Ante los desastres naturales, la resiliencia y la prevención

Los desastres naturales ligados a la crisis climática son cada vez más frecuentes y fuertes. Es claro que debemos de tomar acciones inmediatas para mitigar la crisis climática, reducir nuestras emisiones y ante todo, generar resiliencia en las comunidades más vulnerables ante estos impactos.

Para “EMRE”, el desafío de fortalecer la resiliencia es particularmente relevante ya que en Guatemala se sufren recurrentemente eventos climáticos extremos.

Una base clave para promover el desarrollo energético en Ixcán es, por lo tanto, fortalecer la resiliencia.

Las infraestructuras de generación y distribución eléctrica pueden verse directamente afectadas por fenómenos naturales como inundaciones, tormentas u otros eventos extremos cuya frecuencia e intensidad está previsto que aumente como consecuencia del cambio climático.

¿Qué es la resiliencia energética?

La resiliencia energética, como según define la National Renewable Energy Laboratory (NREL) de Estados Unidos, es "La capacidad de anticipar, prepararse y adaptarse a las condiciones cambiantes y de resistir, responder y recuperarse rápidamente de las interrupciones a través de soluciones técnicas y de planificación adaptables y holísticas"

Contar con un sistema eléctrico fiable, seguro y asequible es fundamental para impulsar el desarrollo económico y social de cualquier país. Las amenazas naturales, tecnológicas y humanas que ponen en riesgo la capacidad para garantizar el suministro nos obligan a apostar por estrategias de resiliencia energética para “blindar” la red eléctrica ante estos fenómenos imprevisibles.

Identificar los puntos débiles mediante el análisis de riesgos, modernizar las infraestructuras, diversificar la generación incorporando energías renovables o crear redes interconectadas que permitan compartir recursos son solo algunas de las acciones que nos van a ayudar a crear un sistema energético resiliente.